miércoles, 15 de mayo de 2013

LA ESPIRITUALIDAD DEL VOLUNTARIO DE CÁRITAS


El voluntario, motivado por un llamado personal en su corazón y en su conciencia, ofrece su solidaridad desde una entrega gratuita y fraterna a los demás, especialmente hacia quienes más sufren. Cada día, los voluntarios encuentran en sus comunidades muchas realidades dolorosas y difíciles, que se transforman en desafío a la hora de vivir esta vocación de servicio.




Ser voluntario no es una manera de hacer sino de vivir. No es dar sino darse a sí mismo, ofrecer su tiempo, sus capacidades, su esfuerzo, invitando a la sociedad, desde su propio testimonio personal, a tomar mayor conciencia sobre la necesidad de trabajar juntos por el bien común.

¿Cómo ser voluntario en Cáritas?

Sumarse a la misión institucional y comprometerse con Cáritas lleva tiempo, trabajo, oración y colaboración de todos quienes comparten el mismo camino.

Ya sea que uno se acerque espontáneamente o en respuesta a una invitación particular, ser voluntario significa un compromiso grande con la acción y con la reflexión, que busca transformar las tareas cotidianas en desde momentos privilegiados de conocimiento interior, tanto a nivel personal como comunitario.

Aquellos que deseen sumarse como voluntarios de Cáritas, pueden dirigirse a su parroquia más cercana para conocer la tarea que allí se realiza y ponerse al servicio del grupo de trabajo el don o talento personal que se pueda ofrecer para acompañar a quienes más lo necesitan.